Es una de las cuentas de este rosario de pequeños pueblos situado en el Camino de Santiago. Al borde de la carretera N-120, en la comarca de Oca. Villambistia aparece citada tardíamente en un documento del año 1515. Es uno de los catorce pueblos que formaban la Intendencia de Burgos durante el periodo comprendido entre 1785 y 1833, era una villa de realengo con alcalde pedáneo. Más tarde se constituiría como ayuntamiento constitucional con el mismo nombre en el partido de Belorado y dentro de la región de Castilla la Vieja.
En Villambistia se recuerdan las ermitas de Santa Cruz, la de Santiago, San Martín y San Roque pero solo se conserva esta última. Se llega a ella tras cruzar el pequeño puente sobre el arroyo Ranaza; se terminó de construir con fondos municipales en 1712; en su interior hay un retablo rococó procedente del convento de San Francisco de Belorado. Está situada en una plazoleta junto a la famosa, por la tradición, fuente redonda de cuatro caños, y a la iglesia parroquial de San Esteban, del siglo XVII; en su interior conserva un interesante cuadro de San Sebastián de escuela italiana así como varios retablos renacentistas. Además desde Villambistia se puede disfrutar de bellísimos paisajes como los Montes de Oca.
Villambistia celebra sus fiestas patronales en honor a Nuestra Señora y a San Roque el 15 y 16 de agosto.
Si te hablan de La Tradición de Villambistia te están diciendo que remojes por completo tu cabeza en la fuente del pueblo, pues este remojón provoca un despeje absoluto del cansancio en los momentos más difíciles. Se dice que cuando un peregrino llegó al pueblo muy fatigado, un anciano del lugar, le animó a que se refrescara la cabeza en la fuente, haciéndolo así, y tras ello, el romero sintió como le volvían las fuerzas y llegando a Santiago, admirado lo comentó entre los demás y este hecho ha ido pasando de boca en boca hasta nuestros días.
Aunque el gentilicio es "Villambistianos", a sus habitantes se les conoce también por el cariñoso apodo de "Cascones".
Hay que escuchar en el silencio de la noche, porque dice la leyenda que en tiempos remotos había un convento en el cerro y cuando los musulmanes atacaron Villambistia lo destruyeron y enterraron sus campanas, y desde ese día se las oye repicar.
Villambistia se encuentra cercana al trazado de la N-120 entre las localidades de Logroño y Burgos.
Hay servicio diario de autobús de línea regular que cubre el trayecto Logroño-Burgos y que tiene parada en Villambistia.
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